1. ASA QUE BRILLA EN LA OSCURIDAD
2. TETINA ANTIDERRAMES Y BOQUILLA EXTRA BLANDA
1 PASO 1 Tetina antiderrames: La tetina antiderrames con su superficie de silicona SkinSoft facilita la transición entre el pecho y el biberón o Trainer+ y ayuda al bebé en sus primeros intentos de beber solo.
2 PASO 2 Boquilla extra blanda sin derrames: Con los bebés que utilizan la boquilla sin derrames extra blanda aceptan mejor la transición entre el pecho y el biberón con el Trainer + o la taza de forma sencilla.
3. TAPA ANTIPOLVO
4. APERTURA ANCHA
°Libres de BPA y BPS: Todos los biberones MAM están fabricados con materiales libres de BPS y BPA (libre de BPA de acuerdo con el Reglamento [UE] n.º 321/2011)
Todos los productos de MAM están fabricados con materiales libres de BPA y BPS.
Silicona ultra suave MAM SkinSoft™ para una sensación familiar
Extra-soft spout – ideal for baby’s first cup
A prueba de derrames - para una primera alimentación independiente
La función de brillo en la oscuridad hace que este producto sea fácil de encontrar sin luz
Para bebés de 4 meses
Four-month-old babies love drinking from a cup. The MAM Cup range provides them with the ideal support here. This will ensure that baby makes the perfect transition from breastfeeding or bottle feeding to independent drinking.
El bisfenol A (BPA) es un componente importante para la fabricación del policarbonato (PC), mientras que el bisfenol S (BPS) es un elemento químico orgánico que se utiliza para la fabricación de polisulfona. Entre otros, el envasado de alimentos, los utensilios de plástico, así como los biberones son tan solo algunos ejemplos de productos fabricados con PC, mientras el uso principal de los BPS son los papeles térmicos y las tintas. El problema: Los residuos de las sustancias químicas se filtran desde el plástico a los alimentos y pueden introducirse en el cuerpo. Esto puede afectar especialmente a bebés y niños pequeños.
Como resultado de la exposición a BPA, expertos y estudios coinciden en que pueden existir trastornos en el sistema hormonal, el cerebro, diabetes y daños cardíacos, así como un aumento del riesgo de padecer cáncer. A pesar de que la evidencia científica no es concluyente aún, la Comisión Europea, basándose en el principio de precaución, ha prohibido el uso de BPA en biberones con el fin de proteger la salud y la seguridad de bebés y niños.