Hemos llegado al comienzo del quinto mes del embarazo y es ahora cuando comienza también el mayor cambio visible del segundo trimestre: la barriguita crece. Esto se debe sobre todo a que tu bebé está cogiendo peso. A continuación te contamos por qué se ha vuelto un poco más dulce, por qué a veces se asusta y todo lo demás que ocurre en la 17.ª semana de embarazo.
El feto tiene una longitud de aproximadamente 11-14 cm (CRL = longitud céfalo-caudal) y pesa unos 100-150 gramos. Los pies miden unos 2 cm y el diámetro de la cabeza es de unos 4 cm.
Tu tesoro se ha desarrollado un poco más hacia la fase de "bebé adorable": las proporciones ahora se corresponden más a cómo va a ser en el parto. La longitud de las piernas ha aumentado, la cabeza ha dejado de ser desproporcionadamente grande y poco a poco se va acumulando algo de grasa del bebé. Esta capa de grasa se encarga posteriormente de que se pueda mantener con más facilidad la temperatura corporal. Hasta entonces, es tarea del líquido amniótico mantener la temperatura del bebé constantemente caliente.
Tu bebé ahora tiene aproximadamente el tamaño de una naranja.
La capacidad auditiva se ha ido perfeccionando. Tu bebé reacciona ahora ante ruidos altos: un ruido repentino incluso puede llegar a asustarlo. A lo mejor puedes percibir estos movimientos bruscos en forma de un suave revoloteo en el vientre (si no es así, tampoco es nada anormal, ya que es posible que hasta la 20.ª semana de embarazo no notes los movimientos).
Desde el exterior ahora también puede escucharse algo: se puede percibir el latido del corazón del bebé con un estetoscopio.
¿Cómo te encuentras en la 17.ª semana de embarazo?
El aumento de la capa de grasa de tu bebé y el líquido amniótico le ayudan a regular la temperatura corporal. Por lo tanto, tu tesoro está bien protegido aunque te estés tomando un baño caliente o si te gusta ir a la sauna.
No obstante, deberías tener en cuenta los siguientes aspectos en cuanto a sesiones de sauna y baño:
Debido a las hormonas del embarazo, también va cambiando la piel de la embarazada. Además se producen mayores cantidades de melanina. Se trata de una sustancia que es responsable de la pigmentación, es decir, de la coloración de la piel. Las embarazadas muestran entonces una mayor tendencia de manchas pigmentarias, pecas y un fenómeno muy especial: la llamada linea nigra (o línea negra). Esta pasa exactamente por el centro de tu cuerpo verticalmente por todo el vientre y atraviesa el ombligo. En el caso de mujeres de tez más oscura, esta línea se muestra más marcada. Por cierto, esta línea la tienen todas las personas. No obstante, normalmente es tan clara que no se puede ver.
La pigmentación aumentada suele desaparecer por si sola después del parto. Debido a las sustancias químicas contenidas, las embarazadas no deben recurrir bajo ninguna circunstancia a cremas blanqueadoras. Es mejor usar una buena protección solar con un alto factor de protección o evitar el sol por completo, siempre y cuando sea posible.
¿Por qué sudan más las embarazadas en ocasiones y por qué es importante el hierro ?
El volumen de la sangre ha aumentado para poder dar la alimentación necesaria al bebé, lo que puede dar lugar a que sudes con más facilidad por la circulación sanguínea más intensa. Sudar mantiene fresco tu cuerpo pero también origina la excreción de minerales. Un aporte suficiente a través de la alimentación ahora es muy importante.
El cuerpo también necesita hierro para la producción de sangre. Las reservas de hierro durante el embarazo se controlan habitualmente con motivo de las tomas de muestras de sangre. Si tus valores fueran demasiado bajos, tu médico te puede asesorar acerca de los alimentos que deberías comer o si puedes necesitar algún suplemento nutricional.
No se recomienda la utilización de preparados de hierro por cuenta propia ya que pueden tener efectos secundarios desagradables. Sobre todo, los problemas digestivos suelen ser frecuentes. No obstante, un nivel demasiado alto de hierro también puede resultar perjudicial para tu bebé.
La vitamina C mejora la absorción de hierro. Un vaso de zumo de naranja con la comida, pimientos, tomates o fruta como complemento no solo están ricos, sino que además son muy recomendables.
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