¿Cómo se puede ayudar a los padres y madres de bebés prematuros?
Por un lado, teniendo en cuenta la propia lengua. Afirmaciones como "Conozco a alguien que también nació prematuramente y es bastante normal hoy", pueden ser difíciles. Nadie sabe lo que va a pasar. Los padres pueden esperar meses de largas terapias. ¿Y qué significa realmente "normal"?
Mejor que consejos bienintencionados: simplemente escuchar.
En lugar de hacer preguntas curiosas sobre la salud del/de la niño/a, puede bastar con preguntar cómo están los progenitores. Aunque sea difícil empatizar con la situación, siempre puedes escuchar.
Las personas son diferentes, algunas necesitan paz y recogimiento, otras, distracción. Si no estás seguro/a de cómo puedes ayudar, pregunta cuidadosamente.
¿La vida en casa es como la de otros padres y madres?
La continuación de la vida después del hospital depende en gran medida del estado de salud del/de la niño/a y de las posibles deficiencias. En muchos casos, los bebés prematuros son controlados con más frecuencia y a largo plazo, ya que las dificultades de aprendizaje, por ejemplo, solo se manifiestan más tarde.
Pero hay una luz al final del túnel: Gracias a las posibilidades médicas actuales, muchos bebés prematuros se convierten en niños/as vivos/as y sanos/as que no muestran su difícil comienzo. Y las arrugas de preocupación de los padres y madres también suelen dar paso a las arrugas de la alegría con el paso del tiempo.