¡Enhorabuena! Por fin estás embarazada. En este artículo descubrirás lo que sucede durante la fertilización y la anidación, y si ya hay indicios de embarazo.
¿Cómo estás en la tercera semana de embarazo?
¿Ya te estás entusiasmando con la prueba de embarazo? Pues empezamos por aclararte la pregunta más importante: ¿a partir de cuándo se puede hacer una prueba de embarazo?
Las pruebas de embarazo comunes miden la hormona GCH (gonadotropina coriónica humana beta) en la orina. Las células que más tarde se convierten en placenta la forman después de la fertilización. La concentración de GCH en la sangre o en la orina aumenta a medida que el embrión se desarrolla, hasta que alcanza su pico alrededor de la semana 11 de embarazo.
Las pruebas pueden indicar embarazo a partir de unos 2 días después de la ausencia de menstruación (14 días después de la fecundación). Las llamadas pruebas precoces pueden incluso tener éxito 2 días antes de la ausencia de la menstruación. Sin embargo, en este momento el resultado puede seguir siendo un falso negativo. En cualquier caso, el mejor resultado se obtiene con la orina de la mañana, ya que la concentración hormonal suele ser mayor.
Si notas una ligera hemorragia o incluso un poco de sangre en el fluido vaginal, podría tratarse de una hemorragia de anidación. Por lo general, solo sale un poco de sangre rojiza ligera. Sin embargo, sucede que esta hemorragia se confunde con una hemorragia menstrual. También es posible que haya un leve dolor abdominal, quizás incluso como de costumbre antes de la menstruación. Sin embargo, muchas embarazas no notan nada en esta fase.
Ahora es importante que tú y tu bebé os aseguréis de llevar una dieta saludable y equilibrada. Esto incluye sobre todo muchas verduras, productos integrales y buenas fuentes de proteínas (carne magra, pescado, legumbres, tofu u otras proteínas vegetales). También es posible que seas más sensible a los olores y sabores de lo habitual. Algunas mujeres embarazadas ahora rechazan instintivamente el alcohol y, por ejemplo, el olor a tabaco. Esto es algo bueno, porque en cualquier caso, debes evitar el alcohol y el tabaco.
¿Todavía no notas ningún cambio? Es algo bastante normal. Muchas mujeres no notan nada relacionado con el embarazo en esta etapa temprana.
El médico(a) te explicará si necesitas complementos nutricionales y cuáles son los mejores para ti. En muchos casos, se recomienda el ácido fólico porque favorece la división celular y puede ayudar a prevenir ciertos trastornos del desarrollo en el embrión.
Sources:
Natürliche Familienplanung heute, Raith-Paula, Frank-Hermann, Freundl, Strowitzki, 2008, 4th edition
Malteser Working Group NFP, Natürlich und sicher. Das Praxisbuch, 18th edition.