¿Cómo comienza el embarazo? ¿Y cómo es posible que durante la primera semana de embarazo no aparezcan síntomas? ¡Haz clic aquí para obtener más información!
Durante la primera semana de embarazo todavía no puedes presentar síntomas de embarazo porque: todavía no estás embarazada. Durante la primera semana de embarazo se produce el inicio del ciclo, es decir, el sangrado menstrual.
Es decir, si esta semana es realmente una semana de embarazo, solo podrá esclarecerse posteriormente.
El ciclo femenino y la fertilidad femenina son unos procesos muy complejos y emocionantes, lo que es motivo suficiente para ver con más detalle qué pasa dentro del vientre antes de que llegue el embrión:
El ciclo comienza con la menstruación. El endometrio generado se vuelve a expulsar y se prepara un nuevo "nido" para el óvulo fecundado. Son varias las hormonas que se encargan de controlar este proceso.
La progesterona se encarga de que el endometrio se vaya generando para que esté preparado para la nidación y alimentación del embrión con nutrientes. El sangrado menstrual comienza cuando baja el nivel de progesterona. Ahora comienza el nuevo ciclo. Aumenta la concentración de las otras hormonas:
Los estrógenos se producen sobre todo en los ovarios. Se encargan de la maduración de los folículos ováricos y la ovulación. No obstante, también influyen sobre el crecimiento del endometrio. Debido al estrógeno aumenta además la producción de moco en el cuello del útero. El llamado moco cervical es responsable, entre otras cosas, de la alimentación y movilidad de los espermatozoides, por lo que impulsa las oportunidades de un embarazo.
No obstante, hay un órgano que es especialmente importante para el embarazo: el útero. En la primera semana de embarazo mide tan solo entre 7-10 cm y pesa unos 50-60 g, y se asemeja a una pera al revés. No obstante, existen grandes diferencias en cuanto a su tamaño y forma. El útero se compone de tres capas: una envoltura lisa, la pared que en su mayor parte se compone de musculatura lisa y la mucosa interior.
La parte estrecha inferior es el cuello del útero (o cérvix uterino). Una parte de este entra en la vagina y en su centro se encuentra el cuello del útero. Este cuello del útero exterior también se puede palpar en la vagina. Antes y después de la ovulación, está firmemente cerrado y se abre en las fechas próximas a la ovulación.
Las malformaciones del útero como, por ejemplo, un doblado hacia atrás u otros problemas, como la endometriosis (el endometrio se encuentra fuera del útero), pólipos o miomas (tumores en el endometrio), pueden repercutir sobre la fertilidad. Si después de un año de relaciones sexuales frecuentes y sin protección no se produce ningún embarazo, se analizan también estas causas físicas.
¡Ahora se trata de relajarse y esperar la menstruación! Cálidas almohadas, y mantas calentitas son los mejores amigos de muchas mujeres en este momento. Unas menstruaciones muy intensas y dolorosas pueden ser indicio de endometriosis. Si no estás segura, puedes comentar el tema con tu ginecólogo o ginecóloga.
Comenta con tu médicosi un suplemento nutricional con ácido fólico podría ser de ayuda.
Lo que más te ayuda durante la menstruación y más allá de ella, además de a tu futuro hijo es una alimentación equilibrada. Es especialmente importante la alimentación con ácido fólico. Como muchas personas padecen falta de ácido fólico, un suplemento nutricional puede ser de utilidad. Lo mejor que puedes hacer es aclarar con tu médico si deberías tomar ácido fólico.
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